-Lo más importante para que un niño sea feliz es conseguir que se desarrolle armónicamente con una serie de estímulos apropiados en su primera infancia y si se hace bien será un adulto lleno de habilidades, cosa que no sucederá con los que no tuvieron esa oportunidad en el momento adecuado, ya que al no hacerlo en estas edades tempranas, es muy difícil que lo consigan de adultos.
-Los ganadores del Premio Nobel de Medicina del año 1982 David Hubel y Torsten Weisel, confirmaron que la falta de los estímulos luminosos del mundo exterior en los primeros meses de vida, impide que se desarrollen las neuronas de la corteza cerebral occipital encargadas de la visión y que pasado este tiempo, aunque reciba dichos estímulos, su vista no será normal.
-Lo mismo sucede con el oído, y el desarrollo de las neuronas auditivas es imprescindible para la formación del lenguaje, pero a veces a muchos niños se les empieza a estimular demasiado tarde, cuando ya no hay mucho que hacer.
-Aunque nos parezca increíble , los niños nacen con una habilidad para interpretar sonidos en cualquier idioma, pero a los 6 meses pierden esa habilidad y consolidan las bases del lenguaje materno.
-Entre 0 y 5 años pueden adquirir con mucha facilidad un segundo idioma, pero después de los 10 años esta condición se perderá rápidamente.
-Resumiendo, el niño que ha tenido un ambiente lleno de conversaciones con adultos, donde se le ha permitido participar, adquirirá habilidades sólidas en el lenguaje, y tendrá las herramientas necesarias para un buen desempeño escolar que se consolidará más o menos a los 9 años.
-Así que volvemos a la teoría de nuestras madres y de nuestras abuelas; a los niños hay que hablarles, escucharles y permitirles participar de la vida diaria en cuanto que son miembros de la familia , y aunque a veces no sepan expresarse, entienden muchísimo mejor nuestros mensajes de lo que pensamos los adultos.
-Buenas noches.