Últimamente, hay una serie de personas obsesionadas con igualarnos a los hombres y a las mujeres. Es algo, absurdo, porque jamás seremos iguales. Por tener, tenemos distinto hasta el cerebro.
- Lo divertido de una pareja son sus diferencias. Se ha demostrado que las parejas que son muy iguales, tienen poca pasión. Es estupendo tener una amiga o un amigo que piensa como tú y que te comprende, alguien con quien nunca discutes, y con quien pasa la vida en un auténtico mar de calma, pero eso no es un amor que
te vuelve loco ni muchísimo menos……
-Louann Brizendine, la psiquiatra que más sabe del cerebro femenino y del masculino, nos da en sus maravillosos libros “El cerebro masculino” y “El cerebro femenino”, las claves para que podamos comprendernos mejor y a la vez comprender al otro sexo.
-El amor pone alas en los pies, y cuando tienes la suerte de tener a tu lado a la persona que amas, cada día es una fiesta….
-Las mujeres pensamos que los hombres solo nos quieren por el sexo, y aunque se ha comprobado que los hombres piensan en el sexo hasta tres veces más que las mujeres, ellos cuando se enamoran, también piensan en el amor, en la vida en común, y desean ser buenos padres.
-Cuando los hombres se emparejan con amor y tienen un bebé, baja su deseo sexual, porque desciende el nivel de testosterona, y sube el de la prolactina, que es una hormona que transforma al hombre en un buen cuidador (es el momento de criar), y aunque no nos hayamos dado cuenta las mujeres, el padre puede oír llorar al bebé mucho mejor que la madre, porque su cerebro ha cambiado, haciendo que su sistema auditivo sea más sensible.
-Los que tenemos hijos con bebés, estamos sorprendidos de su comportamiento como padres. La gran mayoría de papás jóvenes, comparten con sus mujeres, las mudas, los baños, las comidas, las citas con los tutores de la guardería o del colegio, las visitas al médico….etc, porque nuestros maridos aunque fueran buenos padres, se ocupaban exclusivamente de mecerlos, bajarles al parque, pasearlos, jugar con ellos……
-En mi experiencia como profesora durante 32 años, cuento con los dedos, las veces que me han ido a ver los papás de los niños, porque siempre estaban ocupadísimos y venían las madres, y a todos nos parecía lo más normal.
-Lo único malo de esto, es que los hombres son veinte veces más agresivos que las mujeres, y tienen un aspecto territorial en su cerebro que les hace creer que la mujer les pertenece, que es parte de su territorio, así que quieren evitar a toda costa que entre en él otro hombre, y si sospecha que hay merodeando algún otro, se aumenta su agresividad.
-Conocer es poder, así que ahora que lo sabemos, para evitar desilusiones y brotes de violencia, si en una pareja observamos comportamientos inadecuados y violentos, hay que romper inmediatamente, sin esperar a que se arregle, porque luego es demasiado tarde.
-Esto es un consejo de mi propia cosecha, avalado por muchísimos casos que he visto y oído a lo largo de mi vida. Poseer no es amar. El amor tiene que ser generoso y confiado, los celos son síntoma de inseguridad y de baja autoestima, y no se deben consentir nunca.
-La persona que te ama siempre quiere que seas feliz, y nunca te hará sufrir voluntariamente
