"SI NO TIENES LO QUE TE GUSTA, HAZ QUE TE GUSTE LO QUE TIENES"
De tí depende que tu vida sea feliz,debes escoger tus ingredientes.


jueves, 28 de abril de 2011

"Los niños que tratan con sus abuelos, son mucho más empáticos"




Los abuelos somos padres repetidores, que hemos hecho propósito de mejorar nuestras notas, y de no caer en los mismos errores que tuvimos con nuestros hijos, dando muchísima importancia y preocupándonos por cosas que no la tienen.
-Ahora unos estudios recientes de varias universidades americanas, han llegado a la conclusión de que los abuelos desempeñan un papel preponderante para la formación de sus nietos en cuanto a una percepción desde otra perspectiva, desde su historia y su experiencia del mundo.
-Su ternura y cariño muy especial, es fundamental para el desarrollo emocional del niño; saben ser compañeros, y a la vez consejeros incondicionales.
-Los niños que tienen contacto con sus abuelos, afianzan los lazos familiares, ya que los abuelos les hablan de los orígenes de sus familias.
-Los abuelos, son magníficos contadores de historias, y de anécdotas familiares y les cuentan la historia de sus antepasados.
-Los niños comprueban como sus padres confían en sus propios padres, cuando les dejan a su cuidado, y esto influirá positivamente para que luego ellos, recuerden el ejemplo vivido.
-Las abuelas, tenemos mucho amor, y poca responsabilidad, porque las decisiones importantes, las toman los padres.
-Los abuelos tenemos todo el tiempo del mundo para explicar cualquier cosa, y para escuchar a nuestros nietos.
-La disciplina en casa de los abuelos, se relaja bastante en cuanto a horarios, en cambio no perdonan ni una cucharadita, aunque para lograr que se coman todo haya que contar mil historias o hacer muchas tonterías.
-Las abuelas que fuimos madres jóvenes, disfrutamos mucho más con los nietos, porque ahora ya no tenemos miedo, ni remordimientos por no ser madres perfectas.
-Los abuelos valoramos el milagro de la vida, al ver como nuestros niños se maravillan ante una hormiga,
-La curiosidad de los nietos, nos emociona, y no nos cansamos nunca de contestar a sus por qué.
-Me encantan los villancicos, y no importa que estemos en abril, porque Natalia, los aprendió en Navidad, y siempre pide a su abuelito que se los ponga en el equipo del salón.
- Natalia nos canta “cumpleaños feliz” todas las semanas, porque como nos alegramos tanto cada vez que lo hace, pues lo repite.
- Espero que el domingo que vamos a celebrar su tercer cumpleaños, lo cante también.
-Desde que soy abuela, estoy aprendiendo mucho de mis nietos, y me veo películas, desde” Hello Kitty” hasta” Dora la exploradora”.
-Estos nietos nuestros, nacen sabiendo, pues Alvarito que tiene 1 año y medio, maneja el i-pad de su padre, muchísimo mejor que yo.
-Los abuelos marcamos los límites con mucha facilidad, porque como no solemos tener prisa, pues cuando no obedecen, esperamos tranquilamente hasta que lo hagan.
-Los abuelos repiten hasta mil veces el mismo cuento,( que es lo que más gusta a los nietos), porque disfrutan mucho más cuando se lo saben, pero, ¡pobre de ti, como cambies una coma!, te dirán que no es así, hasta que lo digas exactamente como el día anterior.
-Hoy hemos ido mi hija Gema y yo a la tienda Disney, a comprar a Natalia que el domingo celebra su tercer cumpleaños un traje de princesa, con can can, corona, bolso, una muñeca princesa con sus trajes y un pijama de princesas.
-Nosotras hemos disfrutado tanto, que estamos deseando ver su carita cuando lo vea.
- Recuerdo cuando nació mi hijo Daniel, que yo le llevaba a diario a casa de mis padres, y ellos siempre decían que el niño les había cambiado la vida. Como era el primer nieto, todos le festejaban.
- Mi hermano el mayor Jesús Juan, que es ingeniero, le llevaba en su coche a ver las grúas de las obras, y aunque no hablaba, señalaba como loco gritando de ilusión cada vez que veía una.
- Cuando nació Félix, el segundo, me resultaba más complicado ir tan a menudo, y se enfadaban muchísimo, si pasaban dos días sin ver a los niños, pero cuando llegó Gema, ya tenía tanta práctica, que en un momento, hacía la maleta de los niños, y todos a casa de los abuelitos.
- Mi padre, que era un hombre serio, y que siempre estaba trabajando, preparando sus artículos,( pues era periodista), con los niños se transformaba, y hacía tantas tonterías que se partían de risa con él.
-Yo me acuerdo mucho de mi abuelita, que vivía con nosotros, que me enseñó a coser, a hacer punto, que vestía a mis muñecas con maravillosos trajes que hacía de retales, y que siempre tenía tiempo para mí, que era la pequeña de los cinco hermanos, cuando los demás, no me hacían ni caso.
-¡Ojalá mis nietos se acuerden de mí con el cariño con el que yo recuerdo a mi abuelita. Me protegía de mis hermanos, me escondía en su cuarto, cuando en días de lluvia jugábamos en casa al escondite y me disculpaba con mis padres cuando me ganaba algún castigo.
-Gregoria, mi suegra,( que era muy mayor, para aquellos años), ya que tuvo a mi marido con 48 años, siempre quiso tener una niña, y tuvo solamente chicos, por eso, cuando nació mi hija pequeña Gema, se volvió loca con ella, y, disfrutaba tanto con Gema, que esta la tenía tiranizada, y se cerraba con ella en su cuarto a jugar a las casitas y a las tiendas, y las dos, se pasaban allí las horas muertas comprando, pesando y vendiendo.
-¡Los abuelos y los nietos formamos un buen equipo