Creíamos que nos habíamos enamorado de la
persona que nosotros quisimos, o que nos casamos con quien nos dio la gana pese
a la oposición familiar, pero ahora la ciencia nos ha demostrado que es falso.
-Ya no estamos seguros de saber quien guía
nuestro comportamiento, porque parece que los genes codificados en las cadenas
de ADN de nuestros cromosomas, tienen muchísimo que ver.
-Nuestros genes eligen por nosotros. Las
personas tienden a elegir parejas con perfil genético similar al suyo, y los
factores que condicionan el apareamiento no son aleatorios genética mente.
-Nuestros genes no se pasan el día dictándonos
lo que debemos y lo que no debemos hacer, pero afectan al cableado y a la
actividad de nuestro cerebro, y nuestro cerebro es el que decide.
-Nuestro nivel de felicidad, también viene
marcado. Nuestro ADN, trae su propia cuota de felicidad, que podrá aumentar momentáneamente si nos toca el gordo, nos
enamoramos, o disminuir si enfermamos, nos echan del trabajo…etc, pero
enseguida volveremos a nuestro nivel inicial.
-Nuestras experiencias vitales nos pueden
cambiar temporalmente, pero estos campos son transitorios.
-La memoria genética individual, y la
neurobiología toman decisiones constantemente por nosotros sin que nos demos
cuenta.
-Un grupo de científicos de la Universidad de
San Diego California, asegura que la genética influye en la determinación de
nuestras amistades, ya que solemos hacernos amigos de personas que tengan
características genéticas similares a las nuestras.
-En cambio, en nuestra longevidad, solamente el 3% está determinada por la longevidad de
nuestro padre, y otro 3% por la longevidad de nuestra madre, es decir que en
esto solamente influyen un 25% nuestros genes.
-La longevidad va a
depender de las decisiones que tomemos, de
la vida que hagamos, de lo que comamos, y otro 10% lo traemos determinado desde
el útero, según sean los hábitos de nuestra madre, si ha fumado, bebido…etc.
-La buena noticia es que cada segundo cambia el
patrón de nuestros genes, porque se expresan en el cerebro en respuesta directa
o indirecta de lo que nos sucede. Los genes son mecanismos de la experiencia,
así que tenemos una gran responsabilidad si queremos tener hijos de conseguir
los mejores genes posibles con nuestra actitud sana y positiva, para contrarrestar
los defectos que traigamos ya de fábrica.
-Buenas noches
