Esta tarde hemos ido a pasear por "El Pardo".Es un pueblo de Madrid (no sé si ahora será barrio) que está enclavado en un maravilloso monte de encinas. Esta primavera después de tanta lluvia luce como si fuera una postal, porque está frondoso y lleno de colores. El monte bajo se ve amarillo ,por la cantidad de jara que ha crecido .
El cielo tiene unas nubes que recuerdan los cuadros de Velazquez.Hemos paseado por una senda que discurre por la margen izquierda del río Manzanares.
Cantaban los pájaros y en lo alto del cielo volaba un águila. Los patos nadaban tranquilamente y en una esquina estaba parada una oca blanca que comía el pan que le daban unos señores. A menudo aparecen ocas o patos que abandonan allí familias que compraron una cría por Reyes y de la que luego siempre se cansan y abandonan......
Creo que todos debemos pensar en las consecuencias antes de regalar a un niño un animalito que sabemos por experiencia que no puede vivir en una casa fuera de su habitat.
Al llegar a casa y contárselo a mi hija ,se ha puesto a buscar por internet algún centro de protección animal que pueda pasar a recogerla.
Aunque nos ha dado una pena tremenda, no podemos volver a hacer lo mismo.... La oca en estos momentos está mejor en el río hasta que la encontremos acomodo que confío que será pronto
