"SI NO TIENES LO QUE TE GUSTA, HAZ QUE TE GUSTE LO QUE TIENES"
De tí depende que tu vida sea feliz,debes escoger tus ingredientes.


miércoles, 29 de febrero de 2012

"Abrazar un peluche, Nos Consuela Cuando Estamos Tristes"!


Somos hijos de nuestra evolución, y en los momentos en los que nos sentimos tristes, seguimos reaccionando como lo haría cualquier otro mamífero. Esto es lo que afirma Chris Janiszewski, de la Universidad de Florida EE:UU.

-Nuestros antepasados, que eran muy listos, y
no nos cabe la menor duda de que actuaban por intuición, lo sabían, como también sabían tantas cosas que nosotros nos empezamos a creer ahora, cuando nos ponen delante las pruebas, los científicos.

-Desde tiempos inmemoriales, se han regalado a los niños, ositos y muñecos de peluche, para que los   abrazaran y les acompañaba al quedarse solitos en su cuarto por la noche, y también en momentos de tristeza, soledad, o frustración.

-Este estudio, publicado hace poco en la famosíma revista “Journal of Consumer Reseach demuestra que cuando las personas,( tengan la edad que tengan), abrazan la suave piel de un peluche, se sienten mucho mejor, y disfrutan de ello.

-A todos nos tranquiliza que nos abracen cuando nos sentimos vulnerables, porque nos han herido, porque estamos tristes, o nos sentimos solos, o no nos encontramos bien, y nos tranquiliza, mucho más,  abrazar nuestro osito, que escuchar una música suave, o contemplar una maravillosa puesta de sol.

-El contacto de la piel es muy agradable, pero a veces, no nos atrevemos a acariciar a las personas que queremos, por miedo a ser rechazados, y resulta que al abrazarse las personas, se enlazan con un gran vínculo de afecto.

-Cuando nos acaricia alguien que queremos, y que deseamos que lo haga, nuestro cerebro responde positivamente a estos estímulos táctiles, liberando unos neurotrasmisores que están asociados al bienestar y al placer.

-Nuestra sociedad, trivializa mucho los sentimientos, y existen una serie de personas que se dedican a decirte que te quieren cada vez que te ven,( aunque tengamos ambas la seguridad de que no es cierto).

-Por otro lado, muchas veces  nos comportamos de manera demasiado formal con los que sí queremos, para que no descubran no  nuestra fragilidad; por eso, creo que ha llegado el momento de que revisemos nuestro comportamiento, para que nunca nos quedemos cortos con los que de verdad queremos y nos quieren, y por otro lado,  dosificaremos, los:-¡Te quiero!, utilizado como mera fórmula social!.