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-Me acaba de mandar mi hija unos datos, sobre un
grupo de personas que tuvieron la gran
suerte de salvarse del desastre de Las Torres Gemelas, ya que no estaban allí,
en su oficina con sus compañeros, como era su obligación, por diferentes
motivos.
- Me he impresionado tanto al leerlo, que quiero
compartirlo con vosotros y por eso os hago un pequeño resumen…..
-El gerente de una famosa compañía que había sido diezmada por el cruel ataque a las
Torres Gemelas, reunió un día a los empleados
que habían sobrevivido a la catástrofe, para hablar de lo sucedido ese día, en la oficina.
-Como nadie sabe los designios de Dios que son
infinitos, intentó aclararles el motivo por el que una serie de personas que
deberían haber estado en aquel preciso momento en su puesto de trabajo, no
estuvieron y salvaron sus vidas.
-Un hombre puntual y cumplidor, ese día llegó
tarde a trabajar, porque como era el primer día de guardería de su hijito,
quiso acompañarle…..
-Otro joven, salvó su vida, porque ese día le
tocó a él , ir a la pastelería a comprar los donuts para todos los de su departamento…..
-Un hombre, decidió ir andando a trabajar, ya
que tenía el coche averiado; pero como llevaba zapatos nuevos, al rato, notó
que le rozaban muchísimo en un pié, y no
tuvo más remedio que entrar en una farmacia a comprarse unas tiritas.
-Este tipo de sucesos, nos sirve a todos para reflexionar
cuando los planes no nos salen como habíamos planeado en un principio.
-Creo que después de saber que a veces un
retraso puede salvar una vida, ya nunca más veremos de la misma manera una
caravana de tráfico, un ascensor averiado, un encargo inoportuno, porque a lo
mejor por este insignificante detalle las cosas nos saldrán mucho mejor.
