Todos nosotros necesitamos querer y que nos
quieran, porque lo único que nos hace verdaderamente felices, lo que hace que
nos sintamos importantes y satisfechos de nuestra vida, es la seguridad de ese
amor.
-Las personas cuando nos sentimos queridas, nos
queremos mucho más a nosotros mismos, confiamos en nuestras capacidades, y aceptamos la posibilidad de conseguir cualquier
cosa, porque nos sentimos merecedores de ello.
-En los malos momentos, cuando estamos bajos de
tono, una de las cosas que nos ayudan a remontar, es el saber que hay gente que
nos quiere, nos espera y necesita….
-Yo tuve un pequeño accidente doméstico, me caí, y estoy ingresada en el hospital desde
hace una semana.
-Una de las cosas que más me está ayudando a
remontar, es el apoyo y el cariño de tanta gente que me escribe, me llama
y reza por mí.
-Soy muy partidaria de formar en cuanto se
necesitan unas enormes cadenas de
cariño, unos corros mágicos de gente que se agarran de las manos y juntos rezan,
para que mejore nuestra salud. Es como una oración lanzada al cielo a
propulsión a chorro, en uno de esos avioncitos que van dejando huellas de caminos
estelares recordándonos que nos quieren y que están con nosotros en lo bueno.
- Muchísimas amigas me animan cada día, mandándome whattsApps divertidos que hacen sonreír.
-Las relaciones interpersonales, que
establecemos a lo largo de nuestra vida, irán más o menos llenas de afecto,
dependiendo de la afinidad, intensidad, reciprocidad afectiva que sintamos hacia ellos.
-A veces lanzamos cariño sin recibir nada a
cambio, pero este tipo de relaciones dura poco ya que la falta de resonancia
afectiva hace que al no existir un estímulo
psicológico que refuerce nuestra conducta, está irá perdiendo fuerza poco a
poco, y se dirigirá hacia otras personas de las que obtenemos recompensa
afectiva.
-Esta tarde han venido a verme al hospital mis
sobrinos Javi, Joaquín y Carmen, y hemos estado charlando un ratito muy a gusto
y hemos bromeado sobre asuntos familiares.
-Las reuniones familiares son muy útiles porque
mejoran la convivencia y la unión con miembros de la familia a los que no vemos
tanto como nos gustaría, y que en momentos
puntuales, sirven para que recordemos que están aquí cuando los
necesitas y que te quieren.
-Buenas noches.