- Esta mañana he ido con mi hija Gema a Bellas Artes y “La Victoria de Samotracia”
que es una de mis estatuas favoritas; nos ha recibido nada más entrar, en el hall
principal de la facultad.
- Me ha estado enseñando el taller de escultura, porque sabe que me hacía mucha ilusión ver a los alumnos trabajando
- Me ha estado enseñando el taller de escultura, porque sabe que me hacía mucha ilusión ver a los alumnos trabajando
-La escultura es algo mágico que me ha
interesado desde que tengo uso de razón, aunque confieso que nunca tuve ninguna
habilidad especial, ni siquiera con plastilina…
-Modelar el barro, o tallar la madera y la
piedra, creo que requieren de un genio especial que les haga ver la escultura
queriendo salir como le sucedió a Miguel Ángel con el enorme bloque de 18 pies de altura mármol de
Carrara, que estaba arrinconado, ya que un artista llamado Simone da Fiesola,
lo había estropeado tratando de esculpir en él.
-Miguel Ángel, que era Florentino, al verlo,
pidió a las autoridades de la Ópera del Duomo, que se la encargaran a él, (a pesar de que hasta
entonces no había hecho ninguna obra importante en Florencia), porque mirando
el bloque denominado “el gigante”, vió claramente a David.
- Se nos ha ocurrido visitar el taller de
escultura; que agrupa: piedra, madera y metal pues Gema me ha dicho que tienen
unas magníficas instalaciones.
-Primero hemos entrado en el taller de madera,
donde un grupo de alumnos trabajaba en sus bancos las distintas esculturas.
-Zeneida con su escultura orgánica.
-Me ha sorprendido mucho ver que en este enorme
taller esculpen y modelan el metal, y tienen
una enorme forja que nada tiene que envidiar a la de Velázquez en” La fragua de
Vulcano”.
-Roberto está haciendo este árbol de metal.
-Blanca, estaba doblando una plancha.
-Ha sido una visita entretenidísima, y otra vez
he podido comprobar que los artistas son
siempre amables y acogedores, y que no les importa compartir y explicar sus
obras.
-Hemos estado comentando el buen “chi” que se
respira en esa facultad y la suerte de poder trabajar allí todos los días; así
cualquiera iría tranquilo y sin estrés las horas que fuese necesario.
- He encontrado un ambiente tan grato que me da
pena no poder asistir a esas clases.
-Buenas noches.