Creo que nos hemos acostumbrado a seguir unas
normas sociales que probablemente fueron muy prácticas en el momento en el que
se dictaron, pero que en la sociedad actual,
en donde todo va mucho más deprisa, resultan innecesarias y estresantes.
-No necesitamos sonreír todo el rato cuando
alguien pesadísimo nos está metiendo un rollo; no tenemos necesidad de decir
cosas que no sentimos. Creo que sin
necesidad de ser maleducados, podemos fingir que tenemos prisa y marcharnos.
-Podemos escoger nuestros amigos, aquellos que
queremos, que son positivos y que nos hacen felices, e iremos apartando a los que
notamos que nos crispan, y que siempre nos rodean de conflictos; además, suelen están
con nosotros por compromiso, lo mismo que nosotros con ellos.
-Hay gente de la que debemos huir, porque parece
ser alérgica a ser feliz.
-No tenemos que vestir ni que vivir de acuerdo
con las normas que nos dicten otros; somos adultos libres y responsables, y
deberíamos intentar escoger la ropa que nos gusta, que nos resulta cómoda
y con la que nos sentimos más
favorecidos, sin ofender a nadie.
-Carl G. Jung, decía: “El zapato que va bien a
una persona es estrecho para otra: no
hay receta de la vida que vaya bien para todos.
-No es sano ni bueno que nos regañemos y que nos sintamos culpables , porque no es nada
agradable, nos confunde y nos hace perder la claridad.
-Cuando algo no sale según lo esperado; tendremos
que aceptarlo, y volver a intentarlo o no, según el caso.
-No tenemos por qué cambiar a los demás, cada
uno es como es, y de nosotros depende solamente el escogerlo como amigo o no, y
si es algún familiar, pues le aceptaremos y punto.
-No continuaremos con una relación que no nos
satisface, mejor estaremos solos que mal acompañados. No debemos tener miedo a
quedarnos solos, aunque al principio nos cueste romper, porque la costumbre ata
mucho….
-Podemos tomarnos las cosas con más calma, así
que priorizaremos nuestras tareas por orden de importancia, o de urgencia, o de
lo que queramos, pero no tenemos por qué ir como el conejo de" Alicia en el País
de las Maravillas", corriendo agobiado y diciendo:
“Llego tarde”.
-Llama a aquella persona con la que te peleaste, si lo sientes, y la echas de menos. Olvídate de si le toca a ella dar el primer
paso. El cariño rompe barreras….
-Verbaliza lo que sientes con las personas que te rodean; nadie lee tu mente ni te adivina el pensamiento, haz lo que dice este pequeño
robot de cartón:
-Arriésgate si crees que debes hacerlo. Solo tienes una
vida. Tu tiempo es oro, así que no te compliques.
-Tenemos que darnos cuenta de que en la vida no
hay premios ni castigos, solo
consecuencias….