La vida es sorprendente y cambiante, pero muchas
veces no lo queremos aceptar, porque no nos damos cuenta de que las cosas no pueden quedarse congeladas, el Universo se mueve, la Tierra gira, y también se mueve; casi todo se mueve, y por
ello va cambiando.
-Tengo una amiga
que se resiste a aceptar los cambios, y por ese motivo, ha estado al
borde de una depresión.
-Yo la he dicho como decía Paulo Coello,
que cuando en nuestra vida algo se acaba, la única manera de
sobrevivir, es cerrando ese círculo.
-Da lo mismo que se nos acabe el trabajo, el
dinero, el amor, porque si algo se acaba,
se acabó, y la única manera de continuar con
nuestra vida, es aceptando el cambio, dejarlo ir, y empezar de nuevo.
-Las personas que se resisten a los cambios,
solamente consiguen perder el rumbo.
-La vida mejorará, en cuanto decidas mejorar tus
pensamientos.
-La misma vida para una persona será
maravillosa, mientras que para otra terrible.
-Debemos darnos cuenta de que lo único que
tenemos es este momento; el presente, porque el pasado, ya pasó, y de nada nos
valdrá llorar sobre la leche derramada.
-El futuro no existe: En la Odisea Homero
nos cuenta los consejos de la diosa
Atenea al hijo de Ulises “ El futuro
descansa en las rodillas de los
dioses”.
-No debemos intentar aprisionar a quien ya no
nos quiere, ni seguir en un trabajo que ya no nos ofrecen, ni suplicar un amor
que ya no existe….
-Nos merecemos lo mejor, y tenemos que aspirar a
tenerlo, y salir a buscarlo, si queremos, o por lo menos , estar dispuestos a
aceptar nuevas situaciones, nuevas personas, y nuevas cosas.
-Aceptar lo nuevo, es como renacer , y renacer
es aceptar que tú vales mucho, y que existen segundas y terceras y cuartas oportunidades…..
-El mundo está lleno de personas maravillosas,
de trabajos maravillosos, de sitios maravillosos, que no podremos conocer, ni disfrutar, si nos dedicamos a lamentarnos.
-Vaciaremos nuestras mochilas de recuerdos que
ya no sirven, romperemos las fotos de los que ya no queremos, regalaremos lo
que nos estorba, y abriremos cuadernos en blanco para escribir nuestros deseos y
nuestras ilusiones.
-No te llenes de resentimiento, porque el rencor
solamente te hará daño a ti, así que:
-¡Decídete y vuelve a empezar, que puede ser emocionante!
-Termino con una frase de Simón Bolivar “El
libertador”:
“El arte de vencer se aprende en las derrotas”.