-Los últimos días del año, sin saber por qué,
casi todos nos ponemos un poco tristes, queriendo analizar nuestra vida, y, cómo fue este año que ya se
acaba.
- El próximo 2015, no sabemos
cómo será , porque siempre la vida resulta sorprendente; a veces cuando estás
más triste y más perdido, cuando menos
te lo esperas, te das cuenta de pronto
de que tienes un as en la manga, y toda la suerte es para ti….
-En momentos de abatimiento, no podemos
dejar de jugar, porque la vida es como
un juego, una gran partida donde todos sin excepción participamos.
-Decía Albert Einstein: “Hay dos maneras de
vivir la vida: una como si nada es un milagro, y la otra es como si todo es un
milagro”.
-Cada uno tendremos que jugar con las cartas que
nos toquen, así que aprovecharemos las buenas rachas, para acumular energía y
positivismo para que nos queden fuerzas de sobra para sobrellevar las malas.
-Nuestro paso por esta vida , estará lleno de sorpresas, pero
también de tristezas….
- Vamos a aprovechar la ocasión y a reírnos en
casa lo más posible, con cualquier motivo, por cualquier broma, porque no sabemos si nos vamos a poder reír
fuera, y si salimos contentos y con
risas , ya llevamos una gran ventaja
sobre el resto.
-Sabemos los mayores que los padres se van, y
cada día que pasamos sin ellos, pensamos en todo aquello que debimos decirles y
no les dijimos, y aunque pasen los años,
seguimos sintiéndonos huérfanos de su cariño, y echándoles en falta…
-Procuraremos tratar bien a los nuestros, a los
hijos, a los padres, a los maridos , a las mujeres, a los nietos, porque son a los que a veces no tratamos como a los amigos,
quizás por exceso de confianza, y sin
darnos cuenta, nuestras palabras pueden
hacerles mucho daño.
-Creo que no merece la pena justificarse después
de una disputa, porque el que está enfadado contigo, no te creerá; es mejor y
mucho más práctico, proponeros no volver a discutir….
-A veces hacemos llorar a los que más nos
quieren, y nosotros también lloramos, creo que es una pérdida de energía
tremenda, que solo sirve para que ambos
tengamos la sensación de no haber
actuado adecuadamente.
-Debemos pensar cada palabra que pronunciemos, y
recordar, que una vez “suelta, no tiene vuelta”.
-intentaremos entre todos que la vida sea lo más
agradable posible para todos,y mostraremos siempre que podamos
nuestra mejor cara, para que los que se crucen con nosotros hagan lo mismo.
-Lucharemos con uñas y dientes para no caer en
el desánimo que es una melancolía muy dañina para nuestra alma.
-Los niños serán siempre nuestros mejores
profesores, porque aceptan las cosas que les vienen, y olvidan inmediatamente
lo malo sin rencores.
-Haremos una larga lista de cosas buenas que
hemos tenido este año, y la leeremos varias veces, porque la memoria es
mentirosa, y a veces solamente se
acuerda de lo malo.