-Esta mañana, he ido a buscar a mi hija a la
academia, porque no tenía coche, y me he encontrado con unas flores de pascua
maravillosas que había comprado Ana, una de sus alumnas, y gran amiga, para que todas nos lleváramos a casa esta
preciosa planta, que representa la
alegría de la Navidad.
-Regalar una flor de Pascua, dice la tradición
mejicana que da buena suerte a quien la recibe, y decora la casa en esta época
tan entrañable.
-Un refrán dice: “En tu casa el rojo y el verde
no han de faltar, si la suerte no quieres espantar”.
-Gracias Ana, ya sabes que yo soy un poquito
supersticiosa……
-También se la conoce por el nombre de Poinsetia (La hizo famosa Joel Roberts
Pointsett, embajador de EE.UU en Méjico, que fue quien la llevó a su país, la plantó en su jardin, y se
dedico a regalarla a sus amigos por navidad, como habían hecho con él , los
mejicanos.
-Valoraremos los amigos, porque a lo largo de
nuestra vida, aparecen muchísimas personas que se van entrecruzando con
nosotros, y siempre hay alguno que te deja una marca especial, alguien que te
parece que ya le conocías, porque sin darte cuenta, vuestros espíritus conectan,
y pasa a ser muy importante en tu vida.
-También a veces la vida te mostrará malas cartas,
con amigos que no son lo que parecían,a lo mejor es que ni tan siquiera eran
amigos, pero a estos, hay que cerrarles el círculo y dejarles marchar, porque
vuestros caminos no pueden seguir en paralelo.
-Nunca deberemos renunciar a la poesía y al
romanticismo, tengamos la edad que tengamos. A todos nos gusta un detalle
tierno de nuestra pareja, un piropo, una caricia, así que si deseamos recibirla,
de la misma manera, deberemos darla, ya que: “Lo que se siembra se recoge”.
- Nos levantaremos cada mañana con optimismo,
porque cada mañana, la vida comienza, y nosotros somos los que decidimos como
aceptar lo que la vida nos ofrece, y si estamos de buen humor, siempre habrá
una manera, podremos incluso hacer una broma de alguna mala situación.
-Ayudar a los demás es algo muy gratificante, a
todos nos gusta sentirnos útiles, y eso es lo que cuenta. A veces una simple
palabra, una palmadita en la espalda, un ratito de atención, escuchando problemas ajenos, consigue que alguien desgraciado
se sienta mucho mejor y tenga esperanzas.
-Deberemos tener los pies en el suelo, y no
consentir que una mala racha destroce nuestras expectativas, ni que una buena,
nos convierta en personas soberbias sin corazón que creen estar por encima del
bien y del mal.
-Sonreiremos cada día más, porque una sonrisa
borra el mal humor, y a veces el más antipático es quien más la necesita.
-No mentiremos exagerando nuestros dones, ni
nuestros logros, ni nuestras alegrías delante de los desfavorecidos, ya que las
personas nobles y generosas no necesitan humillar a los demás para ser
importantes, porque nuestra importancia siempre deberá estar en nuestro
corazón.
-Conservaremos nuestra esperanza en que las
cosas van a mejorar e intentaremos colaborar con nuestra actitud a que lo
hagan.
-Procuraremos ser espléndidos y generosos con
nuestra familia, porque necesitan nuestros abrazos y nuestras muestras de
cariño más que muchos regalos comprados a toda prisa.
-Si todos los que leemos este blog, decidimos
ser mañana un poco mejores; como todo se contagia, mañana seguramente el mundo
mejorará un poquito.
-Buenas noches