"SI NO TIENES LO QUE TE GUSTA, HAZ QUE TE GUSTE LO QUE TIENES"
De tí depende que tu vida sea feliz,debes escoger tus ingredientes.


domingo, 29 de agosto de 2010

"La boda de Silvia y Rafa"







Ayer por la tarde fuimos a la boda de mis sobrinos Silvia y Rafa. Hacía muchísimo calor, eran las 6 de la tarde y la iglesia estaba en plena calle de Serrano, menos mal que al llegar, unas amigas, entregaban a cada invitado un abanico estupendo que daba muchísimo aire y que nos salvó la vida. Entramos a dar un beso a mi hermana Mª Teresa, la madrina y a Rafa (que esperaba impaciente a la novia) guapísimo con chaqué como el padrino y todos los testigos. La madrina, llevaba un traje largo en tonos gris negro y rojo de Adolfo Domínguez que la sentaba muy bien y un tocado de lazo con plumas muy sencillo.
La novia llegó, cuando todos estábamos dentro. Desfiló preciosa al son de la música, por el pasillo del brazo de su padre y padrino dejándonos a todos pasmados de la elegancia y el porte que tenía. El traje estaba diseñado por un prestigioso modisto, alrededor de un velo de encaje antiguo de la abuela de Silvia, y el pelo lo llevaba recogido debajo de una tiara de brillantes regalo de pedida de su madre.
-La ceremonia, la ofició un sacerdote encantador, que se notaba que les quería mucho, y que salpicó la ceremonia, de anécdotas cariñosísimas de los novios.
-Rafael, se desvivía en atenciones hacia Silvia. Estaban contentísimos, y todo el rato estuvieron sonriéndose y lanzándose miraditas tiernas. Era muy romántico.
-Al salir les envolvió una preciosa lluvia de pétalos de rosa.
- Pusieron un autobús al servicio de los invitados, para evitarles los trastornos de traslado y aparcamiento.
-Nosotros fuimos a La “Casa de Mónico” en nuestro coche, y al llegar, nos encantó el idílico entorno de la celebración. El aperitivo lo sirvieron en el jardín, y aprovechamos para reunirnos con nuestros primos vascos que desgraciadamente vemos casi solo en estos eventos. Hablamos de nuestros días de juventud, de nuestros padres, de nuestros hijos, en fin que en un ratito nos pusimos al día, mientras tomábamos un exquisito jamón serrano y aperitivos abundantes.
-Cuando ya casi no podíamos comer más, nos mandaron entrar a un precioso comedor amplísimo y con unas mesas redondas elegantísimas. La decoración era impecable y a pesar de que sobraba muchísimo espacio, las mesas estaban colocadas con mucha armonía.
-Nosotros nos sentamos con mis primas, mi hermano y mi cuñada, y cenamos estupendamente a pesar de que parecía que no íbamos a poder. Charlamos y nos reímos mucho.
-La vida es sorprendente y cuando te reúnes con las personas que quieres, no importa el tiempo que haya pasado desde la última vez, porque en un momento se salvan los años perdidos.
- Nos encantó el baile de los novios, Silvia se soltó el pelo y recogió la cola del vestido. Pusieron a disposición de las chicas y de las señoras unas comodísimas zapatillas de esparto, para descansar de los taconazos. Yo cogí un par, y agradecí muchísimo el detalle.
-Estuvimos bailando y charlando hasta las 2 y media de la madrugada, y mi hija estuvo hasta casi las 6.
-Esta mañana hemos ido a reunirnos con mis primos que tenían el hotel en El Paseo del Prado, y han comentado que nunca habían estado en una boda donde se cuidasen tanto los pequeños detalles que en el fondo son los más importantes.
-¡Enhorabuena Rafa y Silvia! ¡Que seáis muy felices.