Los seres
humanos, tenemos conciencia social, nos gusta mucho pertenecer a un grupo,y, formar parte de él .
- Los niños
desde pequeños se suelen agrupar para
jugar, porque se sienten mejor, y entre los que forman su grupo, se ayudan, comparten, son
generosos, e incluso están dispuestos a renunciar a cosas que les
gustan por ellos.
-Según Marc van
Vugt, psicólogo social evolucionista de la Universidad de Kent, Canterbury U.K:
“Construir una identidad social fue una estrategia de supervivencia de nuestros
antepasados".
-A veces
renunciamos a ganar más dinero, a tener un mejor estatus social, para poder
pertenecer a un grupo, porque si nos
gusta mucho pertenecer a ese grupo, nos sacrificamos y renunciamos a cosas
aparentemente mejores, ya que valoramos más la pertenencia a ese grupo que cualquier otra
cosa.
-Somos hijos de
nuestra evolución, y para entender esto, tenemos que volver a la época de la
sabana, cuando los hombres primitivos, vivían en un entorno lleno de peligros, rodeados de muchísimos depredadores,
así que decidieron que era mucho mejor vivir en grupo que solos, porque juntos
se protegían y tenían muchas más posibilidades de sobrevivir.
-También
empezaron a mezclarse con otros grupos con los que podían intercambiar
información, productos, y aprender.
-Este Doodle de Google, nos enseña lo fácil que es compartir actualmente información con gente de todo el mundo gracias a Internet.
-Somos
altruistas por naturaleza, pero es mucho más fácil ser generosos con los de
nuestro grupo, que con personas ajenas, porque siempre nos queda la duda de si serán personas sinceras.
-Tenemos dentro
de cada uno de nosotros una serie de emociones, como es el altruismo, pero
tiene un gran peligro, porque hay personas que se querrán aprovechar de esa
manera de ser tan especial.
-Cuando nos movemos dentro de nuestro grupo,
sabemos que hoy ayudamos a uno de los
nuestros, y que a lo mejor dentro de un
tiempo, si los necesitáramos, ellos estarán dispuestos a ayudarnos de la misma
forma.
-Para
permanecer en un grupo, es necesario sentirnos felices dentro de ese grupo,y
pensar que pertenecer a ese grupo, es un gran privilegio.
-En el trabajo,
también estamos dentro de un grupo. En una gran oficina, pertenecemos a una sección, donde hay un grupo
pequeño de personas, que a su vez,
también pertenecen a un grupo más grande, y este a otro, hasta que toda la
empresa está dentro de ese gran grupo, pero nosotros, nos sentimos mucho más a
gusto, moviéndonos dentro de nuestro pequeño grupo, porque nos conocemos, y nos
sentimos más protegidos.
-En la familia,
desde que nacemos, formamos parte de un grupo primario, familiar, donde se cría a los niños con las personas más próximas, padres, abuelos,
que es donde se inician sus primeros aprendizajes de caminar, hablar, escribir,
aprender a desenvolverse en la vida, y a partir de este grupo primario, iremos
perteneciendo a otros grupos fuera del círculo familiar, compuesto por
amigos de guardería, de colegio, de barrio…etc.
-Antiguamente
los grupos de cazadores eran pequeños, y nosotros hemos heredado el gusto por
tener ese grupo de poca gente, aunque, en ocasiones también, nos guste competir
con otros grupos más grandes.
-Dentro de los
grupos sociales secundarios a los que vamos perteneciendo, aumentamos nuestras
habilidades, y adquirimos conocimientos nuevos, porque cada persona siempre nos
aporta algo diferente.
-Buenas noches.
