Podemos elegir, tenemos libre albedrío, así que
si somos desgraciados es porque nosotros lo hemos elegido, aunque nos creamos
que no ha sido así e intentemos culpar a todo el que se nos ocurra.
-Nuestros pensamientos son los que crean nuestra
realidad, y nosotros elegimos tener pensamientos felices o desgraciados,
constructivos o destructivos, tan solo con pensarlos.
-Si decidimos estar amargados porque hay una
serie de cosas que no tenemos o que no podemos ser, es una opción , aunque sea
una mala opción, pero es la nuestra.
-Hasta que no aceptemos , creamos e
interioricemos que somos únicos e irrepetibles , que somos listos y hermosos , que somos capaces si nos lo proponemos de hacer
cualquier cosa que nos ilusione, hasta que no nos aceptemos y nos amemos , no
podremos ser felices ni tampoco amaremos a nadie , porque si no tenemos amor ,
no podremos darle.
-Nadie puede actuar en nuestro lugar, nosotros
podemos hacer las mayores maravillas o las peores atrocidades , pero siempre
será una decisión nuestra aceptada y consentida.
-El motivo de que nos neguemos a aceptarlo es
porque resulta muy cómodo evadirse y culpar a nuestros padres , a nuestros
profesores , a nuestra infancia, o a nuestra juventud de lo que nos pasa, pero
en el fondo sabemos que ahora somos adultos inteligentes con poder de decisión
y que nosotros dependemos de nuestros pensamientos, así que podemos desechar
los malos y dejar solamente los buenos .
-San Francisco de Asís, dijo una frase que
explica muy bien esto:
-“Comienza haciendo lo que es necesario, después
haz lo que es posible, y de repente te darás cuenta de que estás haciendo lo
que creías imposible”.
-Viviremos en paz con lo que no nos es posible
cambiar como es la familia , aunque intentaremos que también ellos saquen lo
mejor de sí mismos con nuestro cariño y comprensión.
-Si tienes un sueño, síguelo hasta
alcanzarlo, porque la vida siempre está dispuesta a concederte esos momentos
mágicos si tú te lo propones y tienes fe en que lo vas a conseguir .
-Buenas noches
