Había una vez un hombre muy bueno, que vivía en una cabaña
en la montaña, rodeado de árboles frondosos.
-Una noche, mientras dormía , se le apareció Dios, rodeado de una luz intensísima que iluminaba
toda la cabaña.
-Dios, le dijo que tenía un trabajo para él, y le enseñó una
roca enorme que había cerca de su cabaña.
-Le dijo que tenía que empujar la roca con todas sus
fuerzas.
-Y así un día y otro día , y otro día, y a pesar de que
empujaba con todas sus fuerzas, la roca no se movía.
-el hombre cada noche se acostaba cansadísimo, y muy frustrado, viendo que a
pesar de todo lo que se esforzaba, la roca no se había movido,
-El demonio, al verle tan
desanimado, le susurraba que no
había conseguido nada de nada, y el hombre estaba cada vez más triste y más
desanimado, pero aunque el diablo le tentó y le tentó, diciéndole que él le podía
ayudar a moverla. El hombre le dijo al Señor:
-“Señor, he trabajado muy duro con esta roca, a pesar de que
no se ha movido ni un milímetro”.
-Dime:¿ por qué he fracasado, si he hecho todo lo que me
dijiste?
-El Señor sonriendo , le contestó.
-“Te pedí que empujaras la roca con todas tus fuerzas, y eso
es lo que has estado haciendo cada día”.
-“En cambio, ahora me dices que has fracasado, pero eso es incierto,
-Nunca te dije que movieras la roca”.
-“Tu tarea era empujar”.
-Ahora me dices que has fracasado, pero piensa un poco, ¿fracasaste?.........
-Mírate despacio:
“-Tus brazos está fuertes y musculosos,”
-“Tu espalda se ha puesto también muy fuerte”.
-“Tu cuerpo se ha bronceado”.
-“Tus piernas se han vuelto
duras”.
-“A pesar de todo, has crecido mucho, y eres más habilidoso”.
-“No has movido la roca, pero has cumplido tu misión, que
era empujar y confiar en mí “.
-¡Misión cumplida!
-¡Ahora, no te preocupes , que yo , moveré la roca”.
-La Roca,, es un cuento antiguo que me mandó un amigo hace
tiempo, y que es muy bueno para darnos una lección de humildad, y saber, que al
final, es Dios el que moverá nuestra
roca
